Visible Thinking o Pensamiento Visible

Esta metodología de aprendizaje no se centra, por tanto, en la adquisición de un gran número de conocimientos sino en conseguir las habilidades necesarias para ponerlos en práctica. Se trata de ahondar en el propio proceso de pensamiento, a través del desarrollo de diferentes procesos de razonamiento. De esta forma se logra profundizar en los conocimientos y conceptos, para la mejor comprensión de los mismos. El objetivo es que los alumnos aprendan habilidades para pensar más y mejor, lo que les lleva a ser críticos y reflexivos, a tomar decisiones y a argumentar bien sus ideas.

¿CUALES SON LAS HABILIDADES DE PENSAMIENTO?

Entre todas las habilidades o destrezas de pensamiento que existen, destacan las siguientes:

1. Considerar otras posibilidades y puntos de vista.

2. Razonar con evidencia, es decir, a partir de hechos y pruebas.  

3. Establecer relaciones y conexiones entre diferentes conocimientos e ideas.

4. Descubrir la complejidad. Aprender a ahondar y profundizar en los conceptos. Saber trabajar con conceptos abstractos.

5. Saber extraer lo esencial de lo secundario.

6. Describir con objetividad.

7. Dudar, hacerse preguntas, intentar buscar las causas y las consecuencias, desarrollar la curiosidad.

¿CUALES SON LAS HERRAMIENTAS DEL "VISIBLE THINKING", PARA HACER VISIBLE EL PENSAMIENTO?

1. Rutinas de pensamiento. Son patrones o rutinas especialmente diseñadas para estimular el pensamiento de los alumnos. Están basados en preguntas sobre lo que ya saben de un tema, lo que quieren saber y lo que han aprendido sobre ese tema. De esta forma los estudiantes relacionan la información previa con la nueva, lo cual les ayuda enormemente a interiorizar el aprendizaje. Estas rutinas se pueden desarrollar a partir de diferentes proyectos, basados en juegos, en trabajo grupal, etc.

2. Destrezas de pensamiento. Son organizadores gráficos (visuales) del pensamiento, que parten igualmente de una serie de preguntas tanto sobre lo que han aprendido los alumnos, como sobre el propio proceso de aprendizaje. Las preguntas suelen ser las siguientes:

¿Qué he aprendido?

¿Cómo lo he aprendido?

¿Qué es lo que me ha resultado más fácil de aprender, y qué lo mas difícil?, ¿por qué?

¿Para qué me va a servir lo aprendido?, ¿cómo lo puedo poner en práctica?

¿Cómo podría mejorar o ampliar mis conocimientos sobre el tema?